Mi nombre es Cristina y soy voluntaria del grupo de estudio compartido. El pasado 11 de mayo celebramos en el colegio un cross para PROYDE con fines solidarios y me tocó pasar el día con los pequeños.
Fue genial pues estuvimos toda la mañana pintando caras, haciendo formas con globos. Es cierto que acabamos agotados pero las sonrisas que nos regalaban los niños eran suficiente para seguir en pie.
Al llegar a las 10 hicimos la parte aburrida, inflar globos con diferentes formas para poder hacer diferentes figuras. Alguna risa nos echamos al ver que somos unos negados atando globos jaja.
Sobre las 11 empezaron a llegar los pequeños. Debo reconocer que la primera cara que pinté fue un desastre jajaja. Se me acercó un niño que se llamaba Alejandro y me pidió que le pintara una cara de pirata, pero no cualquier pirata, el quería un pirata bueno!. Como pude le pinté una cicatriz y un parche en el ojo. Para darle más realismo cogimos una espada. Fue increíble ver la sonrisa que me dedicó el niño, junto un beso y un gracias.
A medida que pasaba la mañana llegaban más y más niños. Y ya perdías la cuenta de cuantas hello kitties, mariposas, Spider-man o piratas habías pintado. Fui haciendo diferentes trabajos por una parte pinté caras y cuando quería descansar me puse a repartir globos. A una niña pequeña le hice un perrito rosa en vivo y en directo la cara de admiración y sorpresa que puso fue adorable.
En resumen fue un día para el recuerdo, lleno de diferentes emociones en donde pudimos colaborar además con el proyecto de PROYDE. .Yo personalmente aprendí algo que nunca se me olvidará, y es que son los niños los que de verdad se sorprenden por todo y los que agradecen hasta el mínimo gesto, algo que deberíamos hacer el resto.
